domingo, 15 de septiembre de 2013


En un partido gris y apagado como la tarde, Ituzaingó mandó en el trámite, pero careció de peso en el área y terminó pagandoló con un empate con gusto a poco. La visita, con sus limitaciones, logró su objetivo: bancar el empate. De esta forma, no se volvió a Rosario con las manos vacías.



ITUZAINGÓ 0 - CTRA. CÓRDOBA 0

Ituzaingó (3-1-4-2): Lescano; Presentado, Luzzi y Dallera; Ibáñez; Vallejos, Zampini, Aliendro y Gauna; Tellas y Messina.

Suplentes: Ferreiro, Di Toro, Bevcar, Gnocchi y Gelpi.

DT: Damián Troncoso.

Cambios: 22' st. Recchia por Messina.
                    27' st. Vigna por Gauna.

Amonestado: Presentado.


Ctral. Córdoba (4-4-2): Poropat; Vocos, Pendín, Lechner y Ledesma; Exequiel Torres, Funes, La Rosa y Taborda; Silvani y Armani.

Suplentes: Jonathan Gómez, Di Santo, Nahuel Bal, Juan Fernández y Joel De Armas.

DT: Osvaldo Diez

Cambios: st. Ferraguti por Torres.
                   33' st. Ratari por Silvani.

Amonestado: - .

Árbitro: Américo Monsalvo (bien).

Cancha: Ituzaingó (mala).



La tarde del León se hizo difícil de sobrellevar. El irregular campo de juego y la actitud de la visita, cediéndole el protagonismo y cerrándole espacios para maniobrar, hicieron que el equipo pusiera a prueba su paciencia. El Charrúa sin embargo, contó con la mejor chance del primer tiempo: un centro al área que no pudo ser despejado por Luzzi, encontró sólo a Armani, que insólitamente la tiró por encima del travesaño, desde una posición inmejorable. Sacando este avance, los de Osvado Diez, mostraron poco y nada en ataque. El Verde tuvo innumerable aproximaciones, centros y llegadas, pero ninguna con la terminación adecuada para generar claro peligro. Gauna, Messina y Vallejos fueron de lo mejorcito, intentando llegar por los costados. Justamente el Coni estuvo cerca con un zurdazo, en la más cercana que hilvanó el León.



El complemento parecía venir mejor barajado. El Verde terminó de adueñarse de la pelota y ahogó las posibilidades de contragolpear de los rosarinos. Messina avisó con un tiro desde el borde del área. A pesar de este arranque más interesante, la mecha se fue apagando. Los ingresados Recchia y Vigna, se sumaron al toque que propuso el equipo. Los avances tuvieron entonces mayor calidad de generación, pero siguió faltando el último pase, el último centro, el último remate. Los de Osvado Diez nunca se propusieron más que mantener la igualdad, y terminaron logrando su fín.

1 comentario:

Anónimo dijo...

señor troncoso señor bona señores dirigentes por favor esten a la altura del club y dejen los chusmerios afuera dan vuerguenza escribiendo semenjantes cosas por internet piensen que hay chicos que leen eso, que hay gente de otros clubes, no sean tan mediocres como siempre