domingo, 19 de abril de 2009

Una animalada…






Ituzaingó dejó sus penurias de lado y goleó al encumbrado Atlas (5-3). Volvió a ganar después de casi cuatro meses y medio, no lo hacía desde el día de la virgen (8 de diciembre de 2008) y lo volvió a lograr en “el día del animal”…Pérez, que marcó tres de los cinco goles. El equipo jugó bárbaro, con mucha garra, corazón, concentración y oportunismo. Se destacaron, además de Nacho Pérez, Los hermanos Alonso (Lucas jugó un partido soberbio), Witty y Páez. Lo de Atlas fue muy flojo, sobre todo defensivamente. El árbitro dirigió muy mal y echó a tres jugadores, Silva en el Verde y dos en la visita. El partidazo tuvo muchas polémicas, golazos y se coronó con una goleada del León, para que más!



Como pocas veces, muchos hinchas del Verde esperaban la derrota de su equipo, como algo irremediable. Es que la pésima realidad futbolística de Ituzaingó hacía pensar, aún a los mas optimistas, que el León no tenia chances ante Atlas. Además, la gran campaña del Marrón con Wilson Severino a la cabeza daba para temerle y mucho a los dirigidos por el Búfalo Szesurak.

La dupla Iñiguez-Vázquez planteó una especie de 4-4-2. Sorprendiendo en la mitad de la cancha la posición de Ezequiel Alonso, como doble cinco con Witty Ibáñez y Gustavo Silva, habitual delantero, jugando de carrilero izquierdo. Por delante de esta línea de medios, Lucas Alonso jugaba suelto, de media punta, y el Animal Pérez quedaba como único delantero definido.

Desde el pitazo inicial de Iglesias, Ituzaingó le peleó el partido de igual a igual a Atlas. En la mitad de la cancha el León metió pierna fuerte y se hizo un partido ríspido de movida. El encuentro pintaba para ser interesante pero ni por asomo se esperaba el partido inolvidable que se estaba gestando.

La actitud del Verde empezó a quebrar lentamente la resistencia de la visita. A los 6’, Oscar Ibáñez probó de afuera del área y la pelota pasó muy cerca de uno de los ángulos del arco de Atlas. Después Ponzio, el arquero del Marrón, le tapó una muy clara a Ignacio Pérez. Hasta que al final llegó el primer grito, tras un tiro de esquina de Silva que conectó de cabeza en el primer palo Carrizo sin poder anotar el gol, Lucas Alonso la devolvió al centro del área y el Animal Pérez, prácticamente abajo del arco, la mandó a guardar. El Verde ganaba 1-0 en 11’, y ya lo merecía.

Pero la tarde era demasiado buena, el equipo dominaba y ganaba. Ya nos parecía extraña tanta tranquilidad, por eso a los dos minutos del gol de Pérez, Atlas tuvo un tiro libre especial para el Gordo Ruíz Díaz, y el ex Ituzaingó lo aprovechó. Claro, apoyado en un error de Godoy, que dio un rebote increíble y permitió que Farías con arco libre la empuje para empatar el partido.

Los dirigidos por Ignacio Iñiguez y Julio Vázquez quedaron otra vez a prueba. Pero su carácter esta vez saldría a relucir. El equipo no se achicó y racionó bien rápido. A los 18’ una corrida de Lucas Alonso, aprovechando un hueco enorme que los de Szesurak dejaron en la derecha de su defensa, le posibilito al León marcar el segundo tanto. Lucas corrió con la pelota pegada al pie casi veinte metros hasta llegar mano a mano con Ponzio, el arquero le tapó el remate pero “el rebotero” de Pérez capitalizó el esfuerzo de Lucas y puso el juego 2-1.

Atlas no parecía tener mucha respuesta a un partido que lo sorprendía, Ituzaingó “le comía los tobillos” en todos lados y cada tanto sacaba alguna contra y sino algún corner o tiro libre que llevaba peligro de arriba para el Marrón. Justamente en una de esas pelotas paradas, Gustavo Silva definió cerca de la raya del arco tras un cabezazo de Ignacio Pérez que atajó Ponzio y posteriormente le cayó en los pies a Ayoroa que habilitó al Pájaro, para poner el 3-1.

Con el correr de los minutos, el arbitro Gastón Iglesias se hacía protagonista del partido. Cobraba todas las divididas para Atlas y arrinconaba con sus fallos al Verde. Hasta que a los 27’, cobró como penal para la visita un agarrón de tantos que hay en las áreas. El remate de los doce pasos fue convertido por Rodrigo Ruíz Díaz (el mejor de ellos en lo que iba del partido), que rápidamente le pidió disculpas a la gente del Verde, recordando su paso por la institución en la temporada 2000-2001 cuando integró el plantel campeón dirigido por el Cordobés Benítez.

Con el 3-2 que evidenciaba el partidazo, apenas jugados 28’ de la etapa inicial, se armó un tumulto generalizado cerca del banco de suplentes local. El resultado: tres expulsados. Nicolás Alonso en el equipo del reality, Gustavo Silva en los nuestros junto con el entrenador Ignacio Iñiguez. El partido era muy atractivo pero también se jugaba con mucho nerviosismo, sobre todo del lado de Atlas, que se veía desbordado por el Verde y reaccionaba con pierna fuerte.

De cara al final del primer tiempo, Atlas tuvo una chance muy clara para empatar en la cabeza del Wilson Severino, pero el frentazo pegó en el travesaño. Hubiese sido muy injusto. El Marrón solo se acercó con pelotas paradas. El Verde realizó un primer tiempo sensacional y se fue con una justa ventaja al vestuario.

Si algo quedaba claro después de ver los primeros 45’, es que el León debía marcar el cuarto gol lo antes posible para no sufrir con Atlas y con el Juez, que cobraba todo para los del reality. Y dicho y hecho. Al minuto de la segunda mitad, Ezequiel Alonso cambió de frente y habilitó a Marcos Zampini, que chocó con el arquero Ponzio, que salió desesperado y desarmado afuera del área. El rebote dejó la pelota suelta para Lucas Alonso que con arco libre, acertó a la red y marcó el 4-2.

Tras el merecido premio para el Duende Alonso, que jugó un primer tiempo brillante. Atlas se complico aún más la vida. El Gordo Ruíz Díaz, ya amonestado por el árbitro tras el primero gol del León, recibió la segunda amarrilla por una protesta airada y se fue expulsado. Iglesias seguía siendo igual de malo, pero esta vez favorecía a Ituzaingó, ya que la expulsión de Ruíz Díaz fue exagerada.

Diez contra nueve, el partido dio lugar para alguna fantasía de Ezequiel Alonso (que jugó muy bien durante todo el juego), las gambetas de Lucas seguían lastimando al rival y Witty era cada vez más dueño de la mitad de la cancha. Pero ninguno de los contragolpes pudo ser aprovechado para liquidar el pleito, y eso que el Verde tuvo varios. Para colmo de males, un tiro libre de Wilson Severino se transformó en golazo a los 24’. El Negro la colgó del ángulo defendido por Godoy, la ejecución del atacante de Atlas fue exquisita y el encuentro quedaba 4-3 a favor de los nuestros.

Antes de que la visita pudiese aprovechar el descuento, en Animal Pérez liquidó la historia. Puso el 5-3 definitivo al minuto del golazo de Severino. Nacho esta vez definió solo ante Ponzio que ya hace rato parecía defender el soledad contra todo Ituzaingó.

En los 20’ finales, Ituzaingó pudo haber marcado el sexto y Atlas puso haber descontado una vez más. Pero la cosa ya estaba juzgada. Godoy, jugó seguro los minutos finales, descolgando todos los centros que el Marrón tiraba como manotazo de ahogado. Para redondear su tarde de ensueño: Ignacio Pérez, Ezequiel y Lucas Alonso, fueron reemplazados ganándose una ovación más que justa. Fueron las tres grandes figuras del encuentro. Por el Animal, ingresó el debutante Julián Canales, que tuvo su bautismo jugando los 3’ minutos finales del partido.

Los jugadores jugaron un partidazo. Le devolvieron algo de lo mucho que la gente les dio alentando al equipo pese a la muy mala campaña. Ahora nos volvieron a ilusionar, los cinco puntos que solo separan al León del reducido hoy son alcanzables, por que jugando así las chances son grandes. Hoy disfrutamos la goleada que quebró una larga racha sin triunfos, la semana que viene contra el Docke será otra historia, pero ojalá se repita…


Por Mariano Genisso

1 comentario:

Sueños de Ascenso dijo...

Hola chicos los quiero felicitar por la gran cobertura que hacen de Ituzaingó. Abrazo grande